EDUARDO...
Eduardo a sus ocho años, llegaba a ese hospital en compañía de mamá para someterse a otra sesión de quimio y de radio, había sido operado hacia un año de ese bicho, y de nuevo tuvo una recaída, el niño sabia que se curaría porque era muy inteligente para su edad, y sabia que lo conseguiría, no tenía miedo, se enfrentaba cada día a esas sesiones tan interminables miraba a su madre, y le decía tranquila mami lo voy ha conseguir, no sufráis, admirable y un héroe.