El diario de la felicidad, Antonio cada día en el proceso de su enfermedad, de su cáncer, iba escribiendo en ese diario, porque quería desahogarse, necesitaba desahogarse, quería por encima de todo luchar por curarse, por llegar a esa meta, y lo fue consiguiendo, el escribir le hacía bien, le hacia un inmenso bien, porque se relajaba, se calmaba de sus preocupaciones, fue superando esas sesiones de quimio, de radio, las operaciones, porque ha pesar de esos bajones, de esos momentos de oscuridad, el plasmar como se sentía, le hacia un inmenso bien, porque su mente, era por encima de todo mas positiva que nunca, Antonio era un valiente de su propio destino, siempre con esa sonrisa en sus labios a pesar de las circunstancias, nunca derramó una lágrima, porque decía que no le gustaba llorar, de todo se sale, porque él ha querido vivir, ha querido ganar esa batalla, sin miedos, con ese adelante, sin tirar la toalla, todo ha sido más fácil de lo imaginado, Antonio se siente libre, ha visto la nueva puerta de su meta, y por fin ha llegado a sus nuevas ilusiones, a su trabajo de pintor en una galería de arte, siempre con ese apoyo de los suyos, de su pareja, de sus amigos, de su familia, y gracias a ese diario de la felicidad, donde le aportado esa inteligencia emocional, esa vitalidad, y esa vitalidad para sentirse realizado...Feliz fin de semana, amigos de la asociación, sin límites se llega a esa meta, con las ganas de vivir, y de luchar.
