Llevaderos de paz, en la armonía de una nueva superación, que es en la nueva tarde, cuando el doctor le dijo que lo había superado, ella derrochaba esas lágrimas de emoción y ya comenzaba a olvidar, aquellos momentos de incertidumbre, de miedos, esas horas de quimio, de radio, de bajas, diagnóstico y hasta que se llega a esa meta de una ilusión incorporada...Feliz tarde amigos, todo irá viento en popa.