Sin miedo a nada, Ernesto estaba superando ese cáncer en sus huesos, había pasado por momentos de incertidumbre, de tensión, de dolor, tras las sesiones de quimio y de radio, y esa última operación había sido más positiva, y Ernesto ya veía cada vez más cerca esa meta, el fiel apoyo de Vero, su pareja lo era todo para él, y el motivo de su lucha, esa lucha por su enfermedad...Feliz jueves para los amigos de la Asociación, que saben enfrentar cada día y luchar.