Ese ímpetu de saber que se ha conseguido, que se ha llegado a esa meta de esa enfermedad, de ese cáncer, que a él le ha servido para darse cuenta de ese valor, de la vida, de los momentos, de los segundos, Alberto, está seguro de si mismo, se siente feliz, porque se encuentra bien, ha superado esas sesiones de quimio, de radio, las operaciones, los momentos de alguna oscuridad, en otras lágrimas, la serenidad de ese apoyo, por parte de su familia, de sus amigos, de su gente, los que han sabido estar allí, a su lado, en este segundo del destino, de su propio camino, Alberto, ya va ha volver a su segunda oportunidad que le brinda ese nuevo sendero, quiere hacer cosas, lo que estaba buscando, lo que le importaba, los proyectos, los anhelos, los motivos, sus propios motivos, la mirada de su chica, Clara, siempre al lado de él, Alberto, es un valiente de su propia vida, porque ahora vuelve a ser él, vuelve a intentarlo, porque ya está esa ventana abierta a su nueva libertad...Feliz miércoles, amigos de la Asociación, la inquietud, el ímpetu, de poder luchar, por salir de esa enfermedad y ver la meta, la nueva meta.